La naturaleza nos llena de bondades cada día. Desde los frutos con los que preparamos la comida que no solo alimenta nuestro cuerpo, sino también nuestra alma, hasta los paisajes que llenan nuestra vida de belleza y nos hacen sentir en paz. Somos afortunados de contar con lugares con tanto esplendor natural que todavía podemos disfrutar.

En la industria del turismo, es esencial ser respetuosos con los lugares que nos dan tanto, y debería ser nuestra responsabilidad cuidarlos. Sobre todo, en los destinos en los que la naturaleza es la atracción principal que hace que miles o millones de personas visiten ese lugar cada año.
Todos los seres humanos obtenemos un inmenso placer de la vida silvestre, las plantas y los paisajes que nos regala la naturaleza, por eso, el turismo tiene la responsabilidad de desempeñar un papel destacado en su cuidado.

En paraísos como Tulum, donde estamos rodeados de naturaleza y cualquier acción que realicemos impacta en el medio ambiente y en todos sus seres vivos, los hoteles y prestadores de servicios turísticos debemos entender que, si no la cuidamos, ya no tendremos nada que disfrutar. También, debemos promover que todos los visitantes la respeten.

El agua de nuestras habitaciones

Delek es un hotel que trata de ser lo más respetuoso posible con el medio ambiente, lo menos invasivos con el entorno. Trabajamos cuidando todos los detalles, desde los materiales de nuestra construcción y los ingredientes que usamos en nuestro restaurante Tatewari hasta el agua en nuestras habitaciones, la cual viene del subsuelo, pues Tulum se localiza sobre un manto acuífero.

Tenemos un pozo de agua y una planta de tratamiento. El agua la sacamos del pozo, la limpiamos y pasamos por un cuidadoso proceso de osmosis. Por esta razón, es agua con un sabor un poco salado, pero completamente limpia y segura para bañarse, lavarse los dientes y manos.
Adicionalmente, en todas nuestras habitaciones tenemos vitroleras con agua natural que rellenamos todos los días y que también puede ser utilizada para el aseo personal.

La naturaleza nos ayuda a sanar y sentirnos mejor, a poner los sentidos en equilibrio. Lo menos que podemos hacer es tratarla con el mismo amor que ella nos da.
Tenemos la fortuna de estar Tulum, un paraíso con una impresionante riqueza natural que todos podemos disfrutar si lo hacemos de manera consciente y respetuosa.

¡Te esperamos pronto en Delek!